Mis Derechos me EMPODERAN
*Mis Derechos me EMPODERAN*
La palabra *Empoderamiento* está de moda, y está cargada de enormes significados y resultados. El *empoderamiento* se basa en asumir un papel protagónico, tener una conciencia de tus derechos, responsabilidades, llevar tu palabra a la acción y crear aliados.
Vivir un papel protagónico está basado en que soy una persona con discapacidad con necesidades e intereses, pero también vivo en una comunidad de la cual soy parte y necesito un espacio inclusivo, libre de barreras. Los derechos que tenemos hoy día como personas con discapacidad son el resultado de acciones de otras personas con discapacidad que en el pasado decidieron ser protagonistas de su vida y de su comunidad. Ellos realizaron acciones que resultaron en un cambio en su entorno y fueron ejemplos para que estos cambios también se dieran, inclusive en otras partes del mundo.
Sus acciones constantes resultaron en el desarrollo e implementación de leyes federales desde la década de los 60 hasta el presente. Una ley significativa de este tiempo es el Acta de Rehabilitación del 1973, que en su sección 504 prohíbe el discrimen en agencias, programas, y servicios que reciben fondos federales. Además, esta ley crea los Centros de Vida Independiente. La constancia logró que en 1990 se aprobara la Ley de Estadounidenses con Discapacidad que prohíbe el discrimen en empleo, programas y servicios ofrecidos por el gobierno estatal y local, incluyendo también entidades privadas. Incluye además los acomodos razonables como herramienta para la igualdad de oportunidades.
De igual forma en Puerto Rico contamos con un sin número de leyes que buscan la inclusión y una mejor calidad de vida para las personas con discapacidad. La Ley 238 del 2000 conocida como la Carta de Derechos de las personas con discapacidad, busca la inclusión de las personas con discapacidad creando política pública basada en que todas las personas son valiosas y pueden contribuir a la vida en esta sociedad; todas las personas tienen habilidades, talentos y dotes; todas las personas pueden desarrollarse con sujeción a sus capacidades. Esta ley reconoce que los impedimentos son una creación social, y que los sistemas impiden que las personas puedan participar de la sociedad. Previo y después de la aprobación de esta ley se han aprobado un sin número de leyes que buscan lograr la inclusión. La creación de estas leyes surge por personas con discapacidad empoderadas y sus grupos de apoyo.
El conocer nuestros derechos como personas con impedimentos nos empodera, nos brinda la seguridad de solicitar y exigir lo que nos corresponde por derecho. Cuando conocemos, podemos frenar el discrimen, abrir nuevas oportunidades e incluirnos en todos los aspectos de la vida. Además, nos permite transformar nuestro entorno en un lugar mejor para nosotros y otras personas con discapacidad. En los centros de Vida Independiente, a este proceso le llamamos Intercesión; esta es una acción comprometida que realizan las personas con discapacidad empoderadas, quienes trabajan para cambiar su entorno y lograr su bienestar y el de todos. Estas acciones van de la mano de un autoconocimiento y conocimiento de sus derechos. Las personas con acción comprometida no se quejan, identifican la problemática y presentan soluciones basadas en los recursos de inclusión existentes, como por ejemplo las leyes. También ellos presentan posibles nuevas estrategias para alcanzar la independencia e inclusión que aspiran.
Te invitamos a ser protagonista de tu vida y de la comunidad a la que perteneces. Recuerda que mientras más conozcas y te eduques sobre tus derechos mayor oportunidades tienes para transformar a tu comunidad y a Puerto Rico en un lugar libre de barreras e inclusivo.
¡Trabajemos para lograr un Puerto Rico Inclusivo!
Nellyber Correa
Especialista en Asistencia Técnica de la ADA